No cabe duda que este mundo cada vez transita con mayor vertiginosidad hacia el fascismo. La militarización de la Frontera Norte, por parte de los halcones norteamericanos; las represiones brutales contra los floristas de Texcoco y los ejidatarios de San Salvador Atenco; la embestida contra los mineros tanto en Pasta de Conchos, como en Lázaro Cárdenas, en Michoacán; son manifestaciones directas de que el fascismo se está consolidando.
Pero también son una muestra de que las movilizaciones sociales tienden a una mayor organización y a que estamos por ver un enfrentamiento directo entre los defensores de los Derechos Humanos. Por eso es significativa la movilización de los emigrantes mayoritariamente de origen latinoamericano en Estados Unidos. Mientras la Derecha se ensaña convirtiendo en delitos la lucha por los derechos más elementales, estas movilizaciones nos muestran y nos recuerdan que la búsqueda de un trabajo mejor remunerado, de un pedazo de tierra y de mejores condiciones de vida, no es un delito. También que el TLC es el punto donde debe pasar el debate de las transformaciones sociales. No obstante, ningún candidato presidencial, ni la Otra Campaña, han tomado este punto´; a lo mucho, López Obrador habla de revisarlo y Marcos parece que se ha olvidado de que el la presentación del EZLN se hizo el mismo día de la la entrada en vigor de dicho tratado, pero no se dice nada de él (O por lo menos yo no lo he leído ni escuchado) en la Otra Campaña.
También, la marcha multitudinaria a lo largo y ancho del vecino país del norte, nos indica, que la lucha debe de verse como un asunto mundial y no local, ante el enemigo de mil rostros que es el capitalismo salvaje (¿Acaso hay otro?) hay que anteponer en términos de Tony Negri, a la Multitud. Pero para llegar a la multitud, toda reflexión de las condiciones materiales de existencia, debe pasar por un análisis crítico del Yo
¿Qué Soy? ¿Que puedo Hacer? las preguntas foucaultianas están más vigentes que nunca.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario